miércoles, agosto 11, 2010

DocTic. Semana 3: La evaluación (Reflexión sobre lo vivido)

La Evaluación….!La evaluación ¡.

Cuando encuadro mi proceso reflexivo  en este término vienen de inmediato a mi mente estas palabras y frases: valoración; medición; criterios; contraste; juicios de valor; orientaciones; toma de decisiones…. Y es que para eso, entre otros alcances, me ha servido esa disposición que asumo al momento de evaluar situaciones, realidades, proyectos, propuestas….;  valorarlas en su justa dimensión- es una pretensión ¡- y de ser necesario medirlas con base a criterios que me establezco para hacer contrastes entre una cosa y otra; para tener referentes en los cuales fundamentar una decisión; para orientar mis procesos personales en búsqueda de salidas y/o respuestas apropiadas a las situaciones que me demandan hacerlo en un momento dado;
Ah ¡pero no es un proceso lineal y tan sencillo como pudiera creerse. Cobra para mí una dimensión particularmente más complicada cuando de evaluar el desempeño de otr@s se trata. Y aquí me detengo para precisar qué cosas hago y/o dejo de hacer cuando, como diseñador y facilitador de mis cursos, me dispongo a plantear el componente de evaluación de los aprendizajes los cuales he enunciado como objetivos, metas y/o competencias a ser logradas por los participantes.  Lo que busco siempre  es determinar y asegurar la correspondencia entre las actividades y herramientas/instrumentos de evaluación que les propongo y los objetivos de aprendizaje planteados. Una vez hecho esto preciso, hago público y discuto con mis estudiantes los criterios para evaluar y cuantificar sus logros. Curiosamente este es el punto que más les  llama la atención, la ponderación de lo que les solicito que realicen y entreguen como producto de cada módulo o unidad de aprendizaje. Y una vez ejecutada y entregada “la tarea”…lo que les importa saber  es, ¿cuánto saqué? ; y  muy pocas veces se levantan sus voces  para compartir cuál es el grado de satisfacción personal con lo hecho, para analizar abiertamente su correspondencia con  el esfuerzo dedicado para  producirlo y, de ser necesarias, las acciones de mejora. No es una necesidad sentida esto último. Y allí es donde creo que debo detenerme para precisar y replantear mi actuación en tal sentido para animarles y animarnos a concretarla, compartirla  y alinear los esfuerzos en función de su satisfacción.
Creo que hemos sido programados en darle prioridad a la nota, a la calificación, a lo cuantitativo más que a la consideración del componente cualitativo de la evaluación. Nos cuesta bastante apreciarla y asumirla como parte del proceso de aprendizaje; para encontrar en las voces de terceros, en sus juicios y puntos de vista, elementos orientadores y de ayuda para  autorregular mis propios procesos de aprendizaje;  para mejorar lo que tengo que mejorar y finalmente, una vez logrado el producto que me es requerido, establecer, sin temores, que lo hecho es producto de mi dedicación, de mi esfuerzo, de mis compromisos y de mi convencimiento de haber hecho las cosas correctas bien.
Considero que es muy complicado para un actor externo evaluar la totalidad de los aprendizajes que puedo lograr en cualquier experiencia de aprendizaje  puesto que generalmente se enfoca en lo que quiere ver como resultado pero desde su propia óptica y sobre la base de lo que se ha establecido como requerimiento de un curso. El aprendizaje es un proceso muy dinámico, complejo y multidimensional, de allí que como evaluadores de procesos y de productos sólo apreciamos pequeñas aristas, subpartes, de lo alcanzado por cualquier aprendiz y el esfuerzo que debemos hacer es, entre otras consideraciones, crear las condiciones para que reflexione y comparta  abiertamente sobre sus logros, sobre sus limitadores e impulsores al trabajo exitoso, sobre su agrado y desagrado ante la tarea exigida, en fin, construir - entre todos los actores involucrados en el proceso- un ambiente de aprendizaje formativo no destructivo, agradable, de confianza mutua, de sentirnos como en casa para emprender y mantenernos en la tarea de aprender con entusiasmo . Lo demás viene por añadidura y considero que es posible lograrlo si nos liberamos de las ataduras que nos hemos impuesto y dejado imponer al  erigimos, en muchas ocasiones, en jueces implacables de los demás!.De lo que se trata es sencillamente de convertir los ambientes de aprendizaje -sean éstos presenciales, semipresenciales o virtuales-, en fértiles terrenos/entornos de creatividad.
La creación de un ambiente como el descrito es, en mi opinión,  otro de los avances que aprecio  en este  curso DocTic, en el cual se incorpora un componente innovador como es el relacionado con la Rúbrica de Evaluación; Diego Leal (2010), matriz en la cual se consideran categorías y niveles para dos dimensiones estratégicas: Aprovechamiento del curso y Contribución al Aprendizaje de Otros y a partir de las cuales cada participante de la experiencia de aprendizaje  es invitado a reflejar su situación inicial y a establecer hasta donde desea llegar, y compartirlo con los participantes  de la comunidad de aprendizaje,”(…) fomentando una autoevaluación honesta del trabajo realizado”; dado que “(...) la evaluación en este curso no busca evaluar el conocimiento de los participantes, sino que estará orientada a observar las evidencias del aprovechamiento del curso y el desarrollo de habilidades que permitan a cada participante avanzar de manera crítica en su propio desarrollo conceptual, así como el nivel de contribución al aprendizaje de otros miembros de la comunidad”. (DocTic, 2010).
 Aprender sin reflexionar es malgastar la energía. - Kung FuTse, Confucio

2 comentarios :

Jean Michel Chaupart dijo...

Luis Rafael,
otra vez por aquí....para leer unas muy interesantes reflexiones sobre la evaluación. La temática es de nunca acabar!...
Sin duda alguna la calificación - la nota - es lo que interesa a los estudiantes que poco se preocupan para hacer una reflexión objetiva sobre su aprendizaje.
De tanto hablar del tema, la modalidad de educación a distancia había buscado nuevas estrategias para evaluar y la llegada masiva de las TICE ha conducido a investigadores, profesores innovadores, profesores autónomos a ir cambiando las tradicionales fórmulas para evaluar...lo que los ha conducido a hablar de "evaluación alternativa".
Para no alargar el cuento, le dejo el título de una de mis entradas en el blog que hice en el curso Elearning2010 (con Diego en modalidad abierta) en la cual intento mostrar cómo procuro aproximarme al concepto de evaluación alternativa en un diplomado 100% en línea para profesores/tutores.
La entrada es un poco larga...Y voy a referenciarla en DIIGO para las personas que podrían estar interesadas en mirar situaciones reales.
Entrada "Algo sobre evaluación en entornos virtuales" en :
http://cursoelrn.blogspot.com/

Cordial saludo,

Jean Michel Chaupart

Luis Rafael Amario O. dijo...

Gracias Jean Michel por este nuevo contacto. Recién he revisado y analizado la entrada "Algo sobre evaluación en entornos virtuales" en :http://cursoelrn.blogspot.com/, y aparte de haberme hecho seguidor de tu Blog, hago mio este comentario de cierre que realizas
"Con esto no todo está dicho ni escrito y hay que seguir ensayando – por supuesto con los aportes de los estudiantes – para aproximarse cada vez más a una evaluación que no sea el fiel reflejo de lo que, muchas veces, se ha hecho en cursos presenciales tradicionales".
Estoy ya en el compromiso y en la disposición de incursionar en mis próximos cursos en línea en la implementación de pautas para realizar una "evaluación alternativa" de procesos y productos intelectuales de l@s participantes, las cuales se nutrirán igualmente de las propuestas de DocTic en el área de la evaluación y cuyos avanmces me dispongo igualmente a compartir con Ustedes.
Cordiales saludos
Luis Rafael